Porque ustedes antes eran oscuridad, pero ahora son luz en el Señor. Vivan como hijos de luz (el fruto de la luz consiste en toda bondad, justicia y verdad)”. Efesios 5:8-9 (NVI)
Hace varios años, los funcionarios de la ciudad de Nueva York construyeron una instalación de desinfección de agua utilizando luz ultravioleta para destruir los gérmenes y desinfectar el agua potable de la ciudad, que se canaliza desde unas 100 millas de distancia. En lugar de usar cloro, el sistema usa la energía del sol para desinfectar y desinfectar el agua usando rayos de luz. Desinfectan más de mil millones de galones de agua todos los días.
La luz es un gran desinfectante. Limpia, higieniza y purifica.
La luz de Dios obra de manera similar en tu vida. Las palabras, los pensamientos y las acciones dañinas te enferman espiritual, emocional y, a veces, físicamente. Cuando confiesas tus pecados a Dios, Su perdón te sana, purifica y limpia.
La Biblia lo dice así: “Si afirmamos que tenemos comunión con él, pero vivimos en la oscuridad, mentimos y no ponemos en práctica la verdad. Pero, si vivimos en la luz, así como él está en la luz, tenemos comunión unos con otros, y la sangre de su Hijo Jesucristo nos limpia de todo pecado” 1 Juan 1:6-7 (NVI).
Muchas personas hoy en día están pasando por días oscuros porque cargan con una carga de culpa, vergüenza y arrepentimiento. Pueden parecer exitosos por fuera, pero por dentro están atormentados por sus secretos.
¿Hay alguna forma de hacer borrón y cuenta nueva? ¿Hay alguna manera de empezar de nuevo? Sí, se llama nacer de nuevo. Eso no significa que des vuelta la página y te esfuerces más. Significa que obtienes una vida completamente nueva, donde todo está perdonado. Todo es limpiado por la luz de Cristo, y las tinieblas del arrepentimiento y la vergüenza se disipan.
Efesios 5:8-9 describe lo que significa ser completamente limpio y perdonado de su pecado y nacido de nuevo: “Porque ustedes antes eran oscuridad, pero ahora son luz en el Señor. Vivan como hijos de luz (el fruto de la luz consiste en toda bondad, justicia y verdad)” (NVI).
¿Qué arrepentimiento, culpa o vergüenza, secretos en tu vida necesitan ser limpiados y desinfectados? Solo exponlo a la luz de Cristo. Entonces podrás seguir adelante, lleno de esperanza en Jesús, la Luz del Mundo.