Rescata a tu familia
Cree en el Señor Jesús; así tú y tu familia serán salvos —le contestaron.
(Hechos 16:31)
¡Dios ama a la familia! Fue él mismo quien la estableció como la primera institución de la tierra. El problema es que muchos han apartado al Señor de sus hogares y, como consecuencia, han visto a sus familias encaminarse rumbo al fracaso. Los valores que deberían formar la base familiar como el amor, la confianza, el respeto, la dignidad y la honra son fácilmente vendidos y echados de lado. Es por eso que crece la influencia del egoísmo, el deseo de ganancia y el desamor, pasando a desmoronar aquello que debía haber sido armonioso, estable y feliz.
El versículo de hoy nos lleva a la historia de un padre de familia que, debido a los muchos problemas, estaba a punto de suicidarse. Al preguntarle a Pablo y a Silas qué era necesario hacer para ser salvo, él obtuvo esta simple respuesta: «cree en el Señor Jesús; así serán salvos tú y tu familia». Excelente salida para los problemas que la familia enfrenta hoy: ¡Creer en el Señor Jesús!
Dios hace posible un nuevo comienzo para tu familia por la fe en Jesús. Podrán vivir en armonía al encontrarse sobre bases sólidas y confiables. Entrega tu vida y tu familia en las manos del Señor. Solo él puede restaurar y transformar tu hogar.